MUJERESNONES 3ª PARTE

Todo me parecía un mundo; se me atascó la bañera, se me fundió una bombilla, se me cayó un enchufe, toda la casa se va deshaciendo poco a poco y yo no soy nada manitas.

En tan solo tres meses, he sido capaz, de arreglar una lámpara entera, desatascar ese desagüe que inundaba mi baño cada vez que nos duchábamos y hasta de clavar un cuadro. ¿Quién dijo miedo?. ¡Yo también soy capaz¡ . Y si yo lo soy, también tú lo eres.

Todo es ponerse. Y lo principal es, intentar no apretar más de la cuenta los tornillos, tuercas, tapas, etc.; ¡Que manía tienen los hombres con apretar todo tanto¡.

Voy reorganizando mi vida, la casa, los niños, ahora nos volvemos más independientes, el cerebro va funcionando a doscientas revoluciones, tengo que hacer el doble de cosas, pensar en el futuro y en otros problemas a los que antes no daba importancia.

Me empiezo a valorar mucho más, estaba como en otro mundo, creía que todo en mi vida iba a ser un camino de rosas, que la persona con la que compartía mi vida me iba a sacar de todos los apuros, pero ahora, tengo que salir yo sola para adelante.

Ahora llega el problema de los niños en etapa adolescente, creen que pueden hacer todo lo que quieren y que el hecho de no tener una figura masculina en la casa les da libertad para hacer y deshacer a su antojo, intentan ponerse por encima de cualquier orden que yo les dicte.

Aunque en el momento de una separación no reaccionas porque te quedas sin fuerzas, en el cuerpo y en el alma, la vida gracias a Dios continúa y te vuelve a dar energía para llevar adelante eso tan importante que es, la educación de tus hijos.

Ahora todo lo que ellos quieren son libertades, pero tengo muy claro que una educación, (como dice, el Juez Calatayud), necesita, "castigos y sobre todo límites".

Si ya es complicado educar a los hijos, (sobre todo en edad adolescente), imagínate con una separación de por medio; ya nadie se pone de acuerdo con nada; Cuando tú les castigas sin salir, se van ese fin de semana con el padre y salen, si les quitas el móvil, tienes que dárselo porque si no es imposible comunicarte con ellos, en todo el fin de semana que estén con su padre, si tú sabes que tienen que estudiar porque hay exámenes el lunes y no tienen ni idea, el padre tiene preparada una excursión justamente para ese fin de semana........., ¡qué difícil¡.

Que verdad es, que nuestra generación no está preparada para este tipo de vida. La familia, estructurada como nosotros la hemos vivido de pequeños, con su padre, su madre y los hijos, no tiene nada que ver con lo que tenemos hoy en día.

Nuestros hijos, ya sabrán como hacer frente a otro tipo de relaciones con niños, de por medio. Pero a nosotros, nos deberían de dar un manual cuando nos separamos.